Doce cuerpos arrojados en múltiples lugares. Once presuntos delincuentes detenidos. Tres presuntos miembros del cártel asesinados en tiroteos con la policía. Se incautaron veinticuatro armas de uso militar. Al menos cinco bloqueos de carreteras.
Todo eso sucedió en el estado fronterizo norte de Nuevo León en los últimos dos días.
Las autoridades estatales informaron que el martes se encontraron cabezas y otras partes del cuerpo de al menos 12 víctimas masculinas en siete localidades del área metropolitana de Monterrey. Los espeluznantes descubrimientos recordaron la década de 2010, cuando la violencia de los cárteles azotó la capital del estado.
Los mensajes dejados junto a los restos humanos fueron firmados por el Cártel del Noreste, con base en el vecino estado de Tamaulipas.
Se cree que “una purga dentro de un grupo del crimen organizado… por deslealtad” es el móvil más probable de los asesinatos, según el Ministro de Seguridad de Nuevo León, Gerardo Palacios Pámanes.
Dijo que las autoridades creyeron que miembros de un grupo criminal rival se habían infiltrado en el Cártel del Noreste y fueron descubiertos.
El secretario general del gobierno de Nuevo León, Javier Navarro, sugirió que eran miembros del Cartel de Sinaloa, que está involucrado en una guerra territorial con el Cartel del Noreste en el noreste de México.
El Fiscal General del Estado, Pedro Arce, dijo que las autoridades revisarán las imágenes de las cámaras de seguridad para tratar de identificar a las personas que arrojaron bolsas y hieleras con restos humanos en Monterrey y municipios cercanos que forman parte del área metropolitana de la ciudad.
El miércoles autoridades estatales realizaron operativos en los municipios de General Bravo, Los Aldamas y Doctor Arroyo y detuvieron a 11 presuntos delincuentes, dijo Palacios en conferencia de prensa. No estaba claro si los sospechosos, uno de los cuales resultó herido en un tiroteo con la policía y fue ingresado en el hospital, son miembros del Cartel del Noreste y están vinculados con el asesinato de los hombres cuyos cuerpos fueron arrojados el martes.
General Bravo, Los Aldamas y Doctor Arroyo están todos en el límite con Tamaulipas. Los dos primeros se ubican en el oriente de Nuevo León mientras que Doctor Arroyo se encuentra en el sur del estado.
Palacios también informó que tres presuntos delincuentes murieron en enfrentamientos con la policía. Un deceso ocurrió en Los Aldamas y dos en Doctor Arroyo. Uno de los hombres asesinados presuntamente planeó y pudo haber perpetrado el asesinato del director de la policía municipal de Linares en junio, dijo.
El ministro de Seguridad dijo que la policía confiscó el miércoles 24 armas de fuego de uso restringido al ejército, así como dos granadas y ocho vehículos.
Un policía recibió un disparo en la pierna durante el enfrentamiento en Doctor Arroyo. Ingresó en el hospital, pero fue dado de alta el miércoles por la noche, informó Palacios en X, antes Twitter.
Además de chocar con la policía que patrullaba, los secuaces del cartel atacaron dos comisarías, una en Iturbide y otra en el vecino municipio de Linares. No se reportaron heridos, dijo Palacios.
Los miembros del cartel también establecieron bloqueos con fuego en la Carretera Nacional, que une Monterrey con lugares en el sur de Nuevo León. Se establecieron bloqueos, incluidos los creados incendiando camiones y autobuses secuestrados, en al menos cinco localidades de los municipios de Hualahuises, Montemorelos y Linares.
El diario Milenio informó que el tráfico quedó bloqueado en ambos sentidos debido a los bloqueos, que se establecieron a última hora de la tarde. Las fuerzas de seguridad y los bomberos respondieron y controlaron la situación.
Según Milenio TV, 15 de los 51 municipios de Nuevo León reportaron estar “bajo asedio criminal” en los últimos dos días. Ocho de los municipios se encuentran en el área metropolitana de Monterrey y siete en el sur del estado. En esos municipios ocurrieron asesinatos, enfrentamientos, bloqueos y otros “hechos violentos”, según Milenio TV.
Palacios dijo el miércoles que autoridades municipales, estatales y federales están trabajando juntas en los desafíos de seguridad en Nuevo León, una potencia industrial y un centro de inversión extranjera.
“Y así es como continuaremos”, dijo el ministro de Seguridad.
“Nuevo León no tiene opción de bajar la guardia. Nuevo León nunca dejará de hacer lo necesario para construir una paz duradera”, afirmó.
con informes de El País, Milenio y el Universal
