El ingreso que percibiremos o del cual viviremos una vez concluida nuestra vida laboral es un tema de vital importancia que debemos considerar dentro de nuestras finanzas personales. Para el caso de México, el Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR) es un pilar fundamental para garantizar estabilidad económica en la etapa de jubilación, por lo que es importante conocer en primer lugar si se estuvo o no registrado ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) para conocer qué régimen de pensión nos corresponde (Ley 73 o Ley 97). Si tu alta ante el IMSS es anterior al 1 de julio de 1997 eres Ley 73 y si es posterior a dicha fecha serás Ley 97.
• Existen dos modalidades de pensión: Cesantía (entre 60 y 64 años) y Vejez ( a partir de los 65 años cumplidos)
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• Mínimo 500 semanas de cotización para obtener una pensión de vejez vitalicia, calculada a través del promedio del salario de los últimos cinco años de cotización.
• La Modalidad 40 del IMSS es un programa que permite mejorar el cálculo de pensión.
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• Si tienes 60 años de edad o más y el IMSS determina que no cumples con los requisitos establecidos en la Ley del Seguro Social para que te otorguen una pensión (500 semanas cotizadas), te entregarán en efectivo los recursos de tu cuenta AFORE.
• Lo recursos provienen del Gobierno Federal y se pagan a través del IMSS
• Existen tres modalidades de pensión: Retiro anticipado (menor a 60 años), Cesantía (entre 60 y 64 años) y Vejez ( a partir de los 65 años cumplidos)
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• Mínimo 1,250 semanas de cotización para obtener una pensión vitalicia o un retiro programado y corresponden a los recursos ahorrados en la cuenta de la AFORE más los rendimientos que se hayan generado durante la vida laboral.
• Lo recursos provienen de una aseguradora que administra la cuenta individual de retiro.
El SAR es un esquema de ahorro que permite a los trabajadores mexicanos ahorrar para su retiro, se compone de dos partes:
• aportación obligatoria: es una contribución que se hace a través de una AFORE y que equivale a 6.5% del salario mensual del trabajador, y
• aportación voluntaria: es una contribución adicional que el trabajador puede hacer para aumentar su fondo de ahorro para el retiro.
Para evaluar las AFORES, es importante considerar varios aspectos, como el rendimiento neto, las comisiones, la calidad del servicio al cliente y la solidez financiera de la AFORE. El rendimiento neto es el rendimiento que se obtiene después de descontar las comisiones y otros gastos. Las comisiones son los cargos que se hacen por administrar el fondo de ahorro para el retiro. La calidad del servicio al cliente se refiere a la atención que se brinda a los clientes y la solidez financiera se refiere a la capacidad de la AFORE para cumplir con sus obligaciones financieras.
Para aprender a ahorrar para el retiro, es importante tener un plan financiero que incluya metas y objetivos a largo plazo. Es recomendable establecer un presupuesto y reducir los gastos innecesarios para poder ahorrar más. También se recomienda diversificar las inversiones y considerar las diferentes opciones de inversión, como los fondos de inversión y los seguros de retiro. Además de estar informado sobre las tendencias del mercado financiero y tomar decisiones informadas sobre cómo manejar el dinero.
En conclusión, el ahorro para el retiro es un tema importante en las finanzas personales, es esencial para garantizar calidad de vida y estabilidad económica durante la etapa de jubilación. Sin importar el régimen bajo el cual nos jubilemos, es importante fomentar el ahorro para que en esa etapa de la vida, ya que serán necesarios muchos recursos económicos y en la cual se han dejado de generar los niveles de ingreso de años de bonanza.