Ciudad de México. Desde noviembre la inflación en México se ha acelerado. El choque negativo del fuerte incremento de frutas y verduras desde diciembre se extendió al arranque de 2024.
La inflación general de México fue de 0.89 por ciento mensual en enero, su tercera alza consecutiva, para así alcanzar una tasa anual de 4.88 por ciento, acelerando desde el 4.66 por ciento de diciembre, y tocar su variación más alta en los últimos siete meses, reveló el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Los participantes de la encuesta de Citibanamex pronosticaron un aumento mensual del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) de 0.86 por ciento para enero, y 4.85 por ciento respecto al mismo mes de 2023, por lo que los datos estuvieron casi en línea con el promedio de las proyecciones.
Una buena parte del avance de la inflación en el primer mes del año se explica por el aumento mensual de 9.53 por ciento y un disparo de 21.78 por ciento anual de frutas y verduras, con una incidencia significativa al alza para el índice general, algo que torna el panorama inflacionario más complejo, pues la política monetaria de altas tasas de interés difícilmente puede incidir en los choques de oferta, como es el caso para este rubro, apuntan analistas económicos.
Los productos genéricos con mayor incidencia en la inflación al alza en enero fueron el jitomate, que aportó 0.404 puntos de 0.89 por ciento mensual; cebolla, contribuyó con 0.081 unidades; así como de loncherías, fondas, torterías y taquerías; cigarrillos; gas doméstico LP; vivienda propia; restaurantes similares; refrescos envasados; calabacita y derecho por suministro de agua, lo que provocó que la cuesta de enero fuera complicada para los mexicanos, pues son productos que están dentro de su consumo frecuente.
Cuesta complicada
En tanto, los genéricos con una incidencia en la inflación a la baja fueron el transporte aéreo; huevo; chile poblano; servicios turísticos en paquete; papaya; azúcar; zanahoria; otros chiles frescos; chile serrano, y alimentos para mascotas, principalmente.
La cuesta de enero se resintió en alimentos y tarifas, pues la variación mensual del índice general fue la mayor para un enero desde 2017. Destacó el fuerte crecimiento en el índice no subyacente, en especial productos agropecuarios, gas LP y tarifas autorizadas (servicio de agua, trámites vehiculares), las cuales típicamente se ajustan al principio del año
, aseveró Alejandro Saldaña, economista en jefe de Ve por Más.
Se aleja del objetivo
La inflación general, que lleva 35 meses fuera del rango objetivo de estabilidad de precios del Banco de México, de entre 2 y 4 por ciento, estuvo presionada también por los servicios, con una inflación anual de 5.25 por ciento, y los agropecuarios, 9.75 por ciento anual en enero, que hicieron que se volviera a alejar.
Si bien el dato del INPC tiene un efecto de base adverso, el choque negativo desde diciembre debido al fuerte incremento en frutas y verduras aceleró la inflación, mientras la atención se dirige a las sequías y a los problemas geopolíticos que podrían generar una crisis en las cadenas de suministro.
El índice de precios subyacente, que excluye de su cálculo la energía y los alimentos frescos, así como determina la trayectoria de los precios a mediano y largo plazos, incrementó 0.40 por ciento a tasa mensual y 4.76 por ciento a tasa anual. El índice de precios no subyacente, que incluye productos agropecuarios y energéticos, presentó un alza de 2.37 por ciento mensual y de 5.24 por ciento anual.
Al interior del índice subyacente, a tasa mensual, los precios de las mercancías subieron 0.41 por ciento y los de servicios, 0.40.
La variación del subyacente fue la menor para un mismo mes en tres años. Como es usual al inicio de cada año, se actualizaron los precios de algunos servicios (fondas, restaurantes) y mercancías (cigarrillos, refrescos), que además resintieron el ajuste al impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS).
Dentro del índice no subyacente, a tasa mensual, los precios de los productos agropecuarios crecieron 4.40 por ciento y los de energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno 0.58 por ciento.
Por entidades, Guerrero registró la inflación más alta del país, con 1.72 por ciento mensual, y anual de 3.84, mientras Baja California Sur presentó la menor de 0.30 por ciento en enero.