La Habana. El Gobierno de Cuba anunció este miércoles que el próximo 1 de marzo entrará en vigor una drástica subida en los precios del combustible y las tarifas eléctricas, medida anunciada en diciembre pasada y postergada pocas horas antes de su implementación, a inicios de febrero.
«Entran en vigor el 1° de marzo nuevos precios de los combustibles para minoristas y nueva tarifa eléctrica para consumidores por encima de 500 kWh», informó el Ministerio de Energía y Minas de Cuba, en la red social X.
Este reajuste fue anunciado en diciembre como una iniciativa para «corregir distorsiones que afectan la gestión del aparato estatal», según las palabras del entonces ministro de Economía, Alejandro Gil, destituido del cargo tras el freno al paquete de medidas, debido a un «incidente de ciberseguridad».
La viceministra primera de Economía y Planificación, Mildred Granadillo, aseguró en rueda de prensa que, tras ser restablecidos los sistemas informáticos afectados, se decidió «actualizar los precios minoristas de los combustibles» a partir del viernes próximo.
El ministro de Finanzas y Precios, Vladimir Regueiro, admitió que el alza en los precios, en algunos casos del 400 por ciento, tendrá una repercusión en los costos de los procesos productivos y en la inflación.
«Eran precios desactualizados y generaban subsidios por el Presupuesto del Estado. Sabemos que esto tiene consecuencias en los costos de los procesos productivos. La medida tiene en sí misma un impacto inflacionario, sin embargo, hay un grupo de decisiones que atenúan su impacto», dijo Regueiro.
El ministro de Energía y Minas, Vicente La O Levy, precisó que el alza en los precios del gas licuado, también anunciada en el reajuste económico, no entrará en vigor aún.
La O Levy precisó que Cuba demanda para su actividad económica unos 8 millones de toneladas de combustible, de las cuales produce cerca de 3 millones y debe importar el resto, pero esos volúmenes han disminuido.
«En el año 2021, Cuba importó 126,000 toneladas de gasolina, en 2022 unas 192,000 toneladas y en 2023 unas 203,000 toneladas. El consumo de Cuba demanda aproximadamente 360,000 toneladas de gasolina», explicó.
Respecto a las tarifas de la electricidad, el ministro afirmó que la medida busca el ahorro, y afectará a quienes consuman más de 500 kWh mensualmente.
Estas medidas distan de ser populares en Cuba, donde los precios se han disparado por el desabastecimiento y la especulación, y los salarios resultan insuficientes para satisfacer determinadas necesidades de consumo.
Al respecto, el presidente Miguel Díaz-Canel insistió durante una reciente reunión del Consejo de Ministros en que tales medidas estaban encaminadas a estabilizar macroeconómicamente el país, defendiendo las conquistas sociales, y rechazó los intentos de presentarlas como un paquete neoliberal.