Utilizando drones marítimos, el Ejército de Ucrania dijo el miércoles que hundió un buque de desembarco ruso en el Mar Negro, frente a las costas de Crimea, una información que no ha sido confirmada por las fuerzas de Moscú.
El buque anfibio Caesar Kunikov se hundió cerca de Alupka, una ciudad en el extremo sur de la península que Moscú se anexionó en 2014, dijo el Estado Mayor de Ucrania. La embarcación tiene capacidad para 87 tripulantes, añadió.
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El hundimiento sería otro revés embarazoso para la flota de Rusia en el Mar Negro y un éxito significativo para Ucrania a 10 días del segundo aniversario del inicio de la invasión el 24 de febrero de 2022.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, se negó a comentar sobre la afirmación durante una conferencia telefónica con periodistas el miércoles. Dijo que las preguntas debían dirigirse al Ejército ruso. Varios blogueros militares rusos confirmaron el ataque al barco, pero no llegaron a confirmar que se había hundido.
Ucrania ha pasado a una posición defensiva en la guerra, lastrada por la escasez de munición y personal, pero ha mantenido sus ataques desde detrás de la línea del frente, en su mayoría estática, que se extiende por mil 500 kilómetros (930 millas).
Es la segunda vez en dos semanas que las fuerzas ucranianas afirman haber hundido un buque ruso en la zona. La semana pasada, publicaron un video que, según afirmó, mostraba a drones marítimos asaltando la corbeta rusa Ivanovets, armada con misiles.
La Inteligencia Militar de Ucrania, conocida por su acrónimo en ucraniano GUR, explicó que su unidad de operaciones especiales Grupo 13 hundió el Caesar Kunikov empleando drones marítimos Magura V5 el miércoles, causándole daños en su costado izquierdo, aunque en un video muy editado que distribuyó no quedaba claro.
El Caesar Kunikov podría formar parte de la flota rusa que escolta a los mercantes que hacen escala en los puertos de Crimea, añadió la compañía.
El GUR subrayó que “es uno de los buques rusos más nuevos” y que “fue usado por los terroristas de Moscú durante las guerras contra Georgia, Siria y Ucrania”.
Posteriormente, el jefe del GUR, Andrei Yusov, adelantó que si bien todavía “no hay cifras concretas”, la información que manejan los servicios de Inteligencia es que “la mayor parte de la tripulación” que iba a bordo, murió. El buque, cuya tripulación habitual es de unas 90 personas, se hundió por completo y no es posible su restauración, según explicó Yusov.
Los ataques ucranianos a embarcaciones y aviones rusos en el Mar Negro han ayudado a alejar a las fuerzas navales rusas de la costa, lo que permite a Kiev incrementar las cruciales exportaciones de grano y otros bienes a través de sus puertos meridionales.
Una nueva generación de sistemas de armas no tripuladas se ha convertido en una pieza central en la guerra, tanto por mar como en tierra.
El dron Magura V5, que parece una lancha rápida de color negro, fue presentado el año pasado. Al parecer alcanza una velocidad de 42 nudos (80 km/h, 50 mph) y podría llevar una carga útil de 320 kilos (700 libras).
Caesar Kunikov, en cuyo honor fue bautizado el buque ruso, fue un héroe soviético en la Segunda Guerra Mundial y falleció el 14 de febrero, el mismo día del ataque con drones ucranianos, de 1943.
DEBILITA A LA FLOTA RUSA
Ucrania afirma que ha inutilizado un tercio de la flota rusa del Mar Negro. “Ucrania ha inutilizado un tercio de la flota rusa del mar Negro durante la invasión a gran escala”, dijeron a CNN las Fuerzas Armadas del país después del ataque de este miércoles.
Esto concuerda con las afirmaciones ucranianas de la semana pasada de que habían inutilizado alrededor del 33% de los buques de guerra rusos, lo que equivale a 24 barcos y un submarino. El barco de desembarco Caesar Kunikov sería el barco número 25 inutilizado, según el recuento de Ucrania.
Las Fuerzas Armadas de Ucrania han logrado hundir o dañar gravemente varios buques rusos, incluida la corbeta Ivanovets, destruida en un ataque el 1 de febrero frente a las costas de Crimea. Además, en diciembre fue destruido el buque de asalto anfibio Novocherkask, que se sumó a los Saratov y Minsk.
La península de Crimea, donde se encuentra una base de la Armada rusa, es un objetivo destacado de las fuerzas ucranianas, que emplean aparatos no tripulados y misiles para alcanzar objetivos rusos, en el marco de la invasión desatada en febrero de 2022 por orden del presidente ruso, Vladimir Putin.
Con información de medios
