El hecho de que Dodgers ganara el título de la Serie Mundial de Béisbol 2024, fue motivo de celebración para sus miles de fanáticos alrededor del mundo.
Por desgracia, para uno en particular el festejo en las calles de Los Ángeles se convirtió en una verdadera pesadilla, pues en un descuido, terminó por volarse la mano izquierda con pirotecnia.
El accidente ocurrió en los festejos del miércoles 30 de octubre, cuando los Dodgers derrotaron 7-6 a los Yankees en el quinto juego.
Full story 👇 https://t.co/bcKhYIKSRy
— TMZ (@TMZ) November 1, 2024
En un video que circula en la red social X (antes Twitter), se ve que el protagonista de este trágico incidente fue un fan de los Dodgers con un jersey del pitcher Clayton Kershaw, ‘King’ con el número 22.
En el inicio, se le observa agachado con un pedazo de pirotecnia en una mano y con un encendedor en la otra. En cuestión de segundos, la persona que graba se aleja y mueve la cámara.
En el siguiente cuadro, aparece una nube de humo generada por la explosión y a lo lejos, se puede ver al fan corriendo hacia una pared, dejando en su camino varias gotas de sangre.
Alrededor se encontraban varias personas, quienes de inmediato se acercaron para auxiliarlo.
Debido al dolor combinado con el shock, la víctima no se quedó quieta y comenzó a caminar por la calle, mientras una sensación ardiente se apoderaba de él.
Un hombre en particular -también fan de los Dodgers- se quedó a su lado mientras llamaba al número de emergencias.
“Su mano voló, oh Dios mío”, se escucha en el video.
Alternate angle of dodger fan blowing off hand after yesterdays celebration. pic.twitter.com/Gc3v03lefm
— Public Freakout (@Publicfreakoute) November 1, 2024
New York Post informó que el fanático, de 25 años, estaba consciente y alerta cuando llegaron miembros del Departamento de Bomberos de Los Ángeles.
Antes de trasladarlo a un hospital cercano para su pronta atención, tuvieron que colocarle torniquetes en ambos brazos.
Hasta el momento, lo único que se sabe es que los doctores indicaron que el hombre sufrió heridas bilaterales en las manos, las cuales describieron como ‘debilitantes, pero no mortales’.
Con información de Reforma y New York Post