El esquema de trabajo híbrido es una opción para reducir el burnout, según un estudio elaborado por el IPADE Business School.
De acuerdo con el documento, cuando una persona se encuentra expuesta de forma continua a situaciones estresantes laborales o con exceso de trabajo y vive con estrés crónico, suele presentarse el síndrome conocido como burnout.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) indica que este síndrome tiene tres características: carencia de energía o agotamiento excesivo; incremento de la despersonalización, negativismo o cinismo en las relaciones laborales; y sensación de inefectividad en el trabajo o falta de realización en el espacio de trabajo.
Durante la pandemia, las condiciones de aislamiento provocaron que las familias, especialmente las mujeres, tuvieran que sumar las labores domésticas, con las de crianza-educación y cuidado infantil, así como de los adultos mayores o personas con discapacidad y enfermedades crónicas. Además, las cargas laborales solían tener horarios irregulares y mayores a los anteriores a la pandemia, lo que condujo a condiciones estresantes”, explicó Yvette Mucharraz y Cano, directora del Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección (CIMAD).
Destacó que el estudio muestra que las madres presentaron un mayor nivel de burnout, debido a que sus niveles de agotamiento y despersonalización fueron mayores, mientras que, en la eficacia, la diferencia no refleja un cambio relevante.
Comentó que el nivel de ingresos y los esquemas de trabajo son factores que mitigan el fenómeno del burnout.