El 2022 cerró con un -20 por ciento en la producción de las empresas constructoras y el 2023 significará un -4 por ciento. Es decir, en dos años será un -24% en la industria en la región, lo que ha orillado al cierre del 25% de las compañías de este ramo.
Donato Gutiérrez Gutiérrez, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), dijo que esto se debe a diversos factores, como son los recortes presupuestales del Gobierno federal, donde se ha dejado sin recurso a las entidades para la generación de más obra pública.
“Coahuila es de los estados que recibe menos recursos de los que se aportan para infraestructura por parte del Gobierno federal”, comentó.
A esto se suma la situación económica del estado, que no le ha permitido generar obras en los últimos seis años.
“Desgraciadamente, en este año, han cerrado varias empresas, éramos 150 a inicios de 2023 y se ha perdido el 25%”, expresó Gutiérrez Gutiérrez.
El titular de CMIC dijo que el 95% de las constructoras en la región Laguna son Pymes, y son precisamente las que menos soportan estas crisis económicas.
Sobre la expectativa para el próximo año, señaló que se ha dialogado con el gobernador electo, Manolo Jiménez Salinas, en el sentido de generar proyectos que involucren a las Pequeñas y Medianas Empresas (Pymes), desarrollar mantenimientos e infraestructura básica.