A lo largo del presente año, los restaurantes han tenido incrementos en sus platillos debido a las alzas en los insumos, las presiones inflacionarias y las obligaciones patronales, lo que ha repercutido, en promedio, en un 15 por ciento de aumento en el ticket al consumidor. Luego del incremento en el salario mínimo, que será de un 20 por ciento para el 2024, la Canirac ha recomendado a sus agremiados que costeen bien sus platillos, pues se han sumado una serie de incrementos a lo largo del año, lo que sin duda tiene un impacto en los gastos y una disminución en el margen de utilidad.
Eduardo Nieto Mendoza, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) en Torreón, explicó que en este sector no todos los colaboradores reciben el salario mínimo, pero sí es el caso de los meseros, por ejemplo, quienes suelen incrementar sus remuneraciones gracias a las propinas de los clientes.
No obstante, indicó que el subir un 20 por ciento de golpe los sueldos de estos trabajadores sin duda tiene un impacto inflacionario.
«Se infla un producto y ya no vuelve al precio que tenía, por ejemplo, sube el limón de 40 a 45 pesos, la siguiente semana quizá baja la inflación y está en 42 pesos el kilo, pero ya no baja a 40, los insumos constantemente están subiendo, el tomate sube a 18, luego baja a 17, entonces ya no llega a los 15 pesos que tenía, así es durante todo el año y no podemos estar moviendo nuestros precios para tener utilidad», comentó.
En este sentido, dijo que durante el presente año se tuvo un incremento de 15 por ciento, en promedio, en los platillos de los restaurantes.
«La verdad, si le quisiéramos subir con relación a lo que nos sube a nosotros en cuanto a insumos, nos iríamos a más, pero la mayoría prefiere no incrementar hasta que sea necesario para no cargarlo a los consumidores finales, estoy hablando de que a veces suben un 7 por ciento a principios de año y en octubre otro 7», dijo el titular de Canirac.
Refirió que el promedio de un ticket en la región es de 220 pesos por persona en un negocio casual, mientras que un establecimiento tipo «fine dining» (buena cena) oscila en los 800 a mil pesos. Dijo que se ha incrementado la frecuencia de quienes salen a comer a restaurantes en Torreón.