Después de que el 2023 resultó mucho mejor de lo esperado, la actividad económica nacional, en especial la inversión y junto con una inflación descendente de forma continua, el 2024 inicia con una perspectiva de crecimiento económico favorable, consideró el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).
Señaló que las expectativas prevalecientes confían que en 2024 se logrará mantener un ritmo positivo en la producción, a la vez que la inflación se mantenga bajo control, buscando lograr el «aterrizaje suave» que desean alcanzar los bancos centrales.
El IMEF resalta el aumento en la inversión tanto pública como privada, particularmente en construcción, a tasas superiores al 20 %.
Si bien el sector manufacturero muestra una desaceleración que se refleja en un menor aumento de las exportaciones de aproximadamente 3 % para 2023, contra uno de doble dígito en los dos años anteriores, el consumo interno y la dinámica de inversión local probablemente seguirán impulsando la economía nacional, aun cuando la evolución de la economía de Estados Unidos se modere. Se destaca una continua expansión del sector de los servicios, en particular el turismo y consumo en restaurantes.
El Instituto indicó que la expansión del crédito bancario ha contribuido a la expansión de la economía. A noviembre de 2023, la cartera total de la banca creció 10 % en los doce meses anteriores. Fue notable el crecimiento del crédito al consumo, en donde los saldos de tarjeta de crédito crecieron 21 % en el mismo periodo.
Consideró que se han logrado avances en abatir la inflación al lograr reducirla a 4.66 % en 2023, pero la inflación subyacente se mantiene por arriba de las expectativas. Se anticipa una eventual reducción de la tasa de interés de referencia, aunque es posible que a un ritmo más lento del que se pensó. Lo mismo puede decirse de la tasa de referencia en Estados Unidos, donde el mercado ha anticipado un mayor número de reducciones contra los mensajes que ha enviado la Reserva Federal.
Esto es relevante dadas las altas tasas de interés accesibles para el sector privado mexicano, donde las grandes empresas se fondean a tasas de 13 %, mientras que las más pequeñas lo hacen a tasas superiores al 20 %. Para lograr un crecimiento sostenido del sector empresarial, sería positivo tener un menor costo de financiamiento.
Indicó que el sector agropecuario tuvo un año difícil en 2023. La sequía pronunciada ha reducido el tamaño de las cosechas; versiones periodísticas reportan reducciones de 40% para el maíz y 16% para el azúcar. Será complicado financiar las siguientes cosechas con este desempeño y una continuación de la sequía en 2024. Es muy probable que suba la cartera vencida del sector y aumenten las importaciones de alimentos.
Entre las perspectivas, IMEF señala que 2024 será un año de elecciones en buena parte del planeta.
También México y Estados Unidos tendrán sus elecciones presidenciales. La carrera política en Estados Unidos podría generar alguna volatilidad en el tipo de cambio si los candidatos estadounidenses utilizan la relación con México para promover sus campañas.
En los siguientes meses se irán procesando los conflictos comerciales y paneles de controversia acerca del maíz amarillo, energéticos y laborales. La volatilidad en las variables del mercado se podría mitigar con resoluciones favorables a estas disputas en un año político.
Continúa la sombra de conflictos geopolíticos, particularmente en Medio Oriente.
La encuesta refleja el anuncio del gobierno de llegar a un déficit fiscal de 5% en 2024 y muestra una mejoría marginal para el 2025 a 3.7%. Refleja también una reducción de la tasa de interés de la política monetaria a 9.50% para el final del año. Se mantiene la expectativa de generación de 600 mil nuevos empleos afiliados en el IMSS contra los 651 mil empleos afiliados observados durante 2023.
Se espera que el tipo de cambio termine 2024 en 18.50 pesos al dólar, después de haber concluido 2023 en 16.92 pesos por dólar. La encuesta estima un crecimiento del PIB de 2.4% y una tasa de inflación de 4% para 2024.
Finalmente, indica que los problemas operativos de Pemex continuarán durante 2024. Las pérdidas en la división de transformación eliminan la rentabilidad lograda en la extracción. A su vez, Pemex se enfrenta a una cantidad importante de vencimientos a corto plazo que no logra refinanciar y que requieren del apoyo del gobierno federal. Existe el reto para este último de evitar un contagio durante este año que pudiera encarecer su costo de financiamiento.