El descarrilamiento de un solo vagón del Tren Maya cerca de la estación Tixkokob en el estado de Yucatán el 25 de marzo se debió a una falla en el sistema de sujeción de las vías, según informó la Secretaría de Defensa de México (Sedena), que opera el Tren Maya.
Ministro de Defensa, general Luis Cresencio Sandoval reveló el martes que aunque el sistema está diseñado para ser automatizado, todavía se opera manualmente debido a su estado incompleto. Se cree que esta operación manual (en este caso, la sujeción inadecuada de las vías) es la culpable del descarrilamiento del vagón.
“El incidente se produjo por falta de fijaciones mecánicas de tornillos que aseguren el cambio de vía con el riel”, se lee en un documento exhibido por Sandoval durante la conferencia de prensa matutina del martes del presidente Andrés Manuel López Obrador en Palacio Nacional.
Debido a que el tren viajaba a baja velocidad, aproximadamente 10 kilómetros por hora, sufrió daños mínimos y no hubo heridos. Actualmente las autoridades federales están llevando a cabo una investigación. En la evaluación de los daños también participan el fabricante del tren, Alstom, y el constructor de vías, Azvindi.
Este incidente genera preocupación sobre el proyecto del Tren Maya, que ha enfrentado críticas por su inauguración prematura y su impacto ambiental. El ferrocarril, una iniciativa de infraestructura emblemática del actual gobierno, se extiende 1.554 kilómetros a través de los estados de Quintana Roo, Yucatán y Campeche en la Península de Yucatán y los estados vecinos de Tabasco y Chiapas. Originalmente se había proyectado que costaría 7.500 millones de dólares, pero ahora el gobierno prevé que el precio final supere los 28.000 millones de dólares.
Inicialmente, el presidente López Obrador había calificó el descarrilamiento como “extraño” insinuando la posibilidad de un sabotaje destinado a hacer quedar mal a su gobierno en el período previo a las elecciones de junio. Sin embargo, según se informa, no hay evidencia que respalde esta teoría.
El Tren Maya inició operaciones en tres de sus siete tramos en diciembre. El incidente del descarrilamiento ocurrió en el Tramo 3, cerca de la estación Tixkokob ubicada al oriente de Mérida, capital de Yucatán.
Imágenes en las redes sociales mostraron el último vagón del tren, que se dirigía a Cancún, fuera de las vías cerca de un cruce ferroviario. La agencia Tren Maya emitió un comunicado reconociendo el descarrilamiento, ocurrido cuando el tren pasaba por un interruptor de vía en la entrada de la estación Tixkokob.
Los funcionarios aseguraron al público que un comité está investigando el incidente y que el Tren Maya implementará medidas preventivas para evitar incidentes similares en el futuro.
con informes de Reforma, La Jornada Maya y Proceso