La unidad de riego Piedra Azul, enclavada en el municipio de Teotitlán del Valle, en Oaxaca, enfrenta una grave sequía, pues sólo queda 30% de su almacenamiento. Ésta fue construida artesanalmente en 1968 por los campesinos para la siembra y bebedero de los animales de pastoreo.
El bajo nivel de almacenamiento del cuerpo de agua también mermó la presencia de visitantes en fin de semana, esto porque es un lugar para recorridos en lancha y senderismo para estar en contacto con la naturaleza.
El área de captación de agua, tiene más de 50 años, tiene una capacidad de menos de un millón de metros cúbicos, al paso de los años fue transformado para el disfrute de propios y visitantes, a cargo de la misma comunidad de Teotitlán, como una atractivo más en esta población de artesanos del textil.
Cutberto Ruiz Jarquín, meteorólogo de la Coordinación Estatal de Protección Civil y Gestión de Riesgos, precisó que este vaso de agua es importante para el uso de la comunidad zapoteca de Teotitlán, para el riego de alfalfa y maíz de temporal.
En circunstancias similares se encuentran otras unidades de riego artesanales, como El Estudiante y La Azucena, en San Andrés Huayapam; El Chapulín, en Santa Cruz Xoxocotlán y La Rosita, en Tlalixtac de Cabrera, todas en la zona metropolitana de Oaxaca.
Agregó que Protección Civil convocó a los comités y comuneros encargados de los cuerpos de agua artesanales aprovechar este momento de sequía –cuando aún no empieza el ciclo agrícola— para realizar un limpieza profunda del tanque de almacenamiento, en beneficio de la sanidad comunal, animales de pastoreo y paseantes.
Como medida preventiva fueron exhortados a retirar el sedimento y suciedad que se concentra en esta área de captación de agua, previendo el próximo ciclo de lluvias; y, a corto plazo, recuperar las aguas cristalinas, proveniente de las zonas boscosas serranas”, expuso.
*mcam