Tres periodistas radicados en Guerrero que fueron secuestrados la semana pasada han sido liberados, pero el hijo de uno de ellos sigue desaparecido.
La Fiscalía General de Justicia (FGE) de Guerrero informó este sábado que Marco Antonio Toledo, Silvia Nayssa Arce Avilés y Alberto Sánchez Juárez quedaron en libertad.
Guadalupe Denova Flores, la esposa de Toledo, también fue liberada, pero su hijo Alberto Toledo Denova, de 28 años, aparentemente todavía está retenido por sus secuestradores y se está buscando para localizarlo.
La FGE dijo que los tres periodistas y Denova fueron liberados debido “al fortalecimiento de los operativos de búsqueda y al despliegue de autoridades de seguridad federales y estatales en la región norte” de Guerrero.
Toledo, director de la revista Espectador de Taxco, fue secuestrado junto con su esposa y su hijo por hombres armados que irrumpieron en su domicilio en el municipio de Taxco el 19 de noviembre.
Arce y Sánchez, un matrimonio que dirige el medio de noticias RedSiete, fueron secuestrados por hombres armados el pasado miércoles en Taxco, un popular destino turístico a menos de 200 kilómetros de Ciudad de México.
Los tres periodistas habían recibido amenazas antes de su secuestro.
Toledo, quien además de dirigir el Espectador de Taxco escribía para otros medios de comunicación de Guerrero, informaba sobre temas políticos y de seguridad.
“Recientemente publicó un artículo en el que condenó la aprobación por parte del gobierno municipal de un presupuesto para una obra pública en Taxco”, organización defensora de la libertad de prensa. El artículo 19 decía.
Esa organización señaló que teléfonos celulares y computadoras fueron sustraídos de la casa de Toledo por los hombres armados que lo secuestraron.
Arce cerró previamente otro sitio de noticias que dirigía debido a amenazas que recibió del crimen organizado, según el periódico El Universal.
Leopoldo Maldonado Gutiérrez, director de Artículo 19 en México, dijo en una entrevista radial que la violencia contra la prensa es un problema particular en Guerrero, un estado pobre del sur conocido por la anarquía en ciertas áreas.
“La violencia está rampante en gran parte del país, como en Guanajuato y Tamaulipas, y en Guerrero [there is] violencia específica contra la prensa”, dijo.
“Hay que recordar que Guerrero ocupa el quinto lugar [among Mexico’s 32 federal entities] por la cantidad de agresiones… contra la prensa”, dijo Maldonado citando datos del periodo entre 2009 y 2023.
Artículo 19 informó en septiembre que se cometió un acto de agresión contra trabajadores y organizaciones de medios mexicanos cada 16 horas en promedio durante el primer semestre de 2023.
La organización también dijo que 161 periodistas han sido asesinados en México desde el año 2000, incluidos 41 durante la actual administración federal.
con informes de El País, el Universal, El Economista y Reforma