La Concordia, Sin. “Me van a seguir haciendo lo que el viento a Juárez”, respondió el presidente Andrés Manuel López Obrador tras la reciente publicación de dos reportajes de medios internacionales en los que se le vinculó con un presunto financiamiento del narcotráfico en dos de sus campañas presidenciales.
Desde este poblado, donde el mandatario encabezó la ceremonia de inauguración del Acueducto Picachos-Concordia, dijo que estas piezas periodísticas son muestra que la oposición tiene temor y está muy molesta.
Prometió que se seguirá apoyando a este estado, con obras como este acueducto que dotará de agua potable a 13 comunidades de este municipio, pues si bien existía la presa, el agua se enviaba sólo a Mazatlan y los poblados cercanos al cauce sufrían de falta del recurso, por lo que el mandatario consideró que este real que ahora les llevará el líquido es “un acto de justicia”. Además, prometió que tras el proceso electoral regresará a territorio sinaloense.
“Nos vamos a seguir encontrando, voy a regresar a Sinaloa, en los próximos tres meses no, viene la veda electoral y no quiero, como se dice en el beisbol que me vayan a cepillar, porque ya vi cómo andan: con mucho miedo y enojadísimos y con la máxima del hampa del periodismo y del hampa de los delincuentes de cuello blanco según la cual la calumnia cuando no mancha, tizna”.
Sin embargo, remarcó, debido a que ha conducido si vida con honestidad, descartó que esa campaña pueda afectarle.
“Eso puede aplicar en otros casos, cuando no hay principios, cuando no hay ideales; pero yo siempre he hecho de mi vida una línea recta y lo que estimo más importante en mi vida es la honestidad, por eso me van a seguir haciendo lo que el viento a Juárez”.
El jefe del Ejecutivo destacó que a lo largo de su mandato, que concluirá en siete meses, tuvo la oportunidad de trabajar con dos gobernadores del estado: primero con Quirino Ordaz (PRI) y posteriormente con Rubén Rocha (Morena), a este último se refirió como su hermano.
“Estoy muy contento siempre que vengo a Sinaloa, vamos a seguir apoyando al pueblo de Sinaloa. Tuve la suerte, estoy por terminar, me faltan siete meses, tuve la suerte que los dos gobernadores trabajaron de común acuerdo con nosotros o el gobierno federal, Quirino ayudó, pero Rubén es mi hermano, nos conocemos, ya llovió, desde hace muchos años, y vamos a seguir apoyando al pueblo de Sinaloa y vamos a seguir apoyando al gran gobernador que tienen, el maestro Rubén Rocha”.
El jefe del Ejecutivo destacó algunos de los logros de su administración, como los programas sociales para 35 millones de familias, las becas a estudiantes de escasos recursos, los trenes de pasajeros, programas para el campo, entre otros.
A propósito del apoyo a los campesinos, remarcó las diferencias con los regímenes neoliberales: “En seis sexenios, 36 años, seis gobiernos, hicieron 22 mil hectáreas de riego, ¡en 36 años! Nosotros, vamos a dejar más de 100 mil hectáreas de riego, en seis años”.
Al referirse al acueducto que inauguró esta tarde junto al gobernador Rocha y al titular de la Comisión Nacional del Agua, Germán Martínez, el presidente señaló que se trata de “un asunto de justicia”, pues dotará de agua a quienes les faltaba.