Después de cuatro años de ausencia, nuestro país ha regresado al top 25 de mercados con mayor atracción de Inversión Extranjera Directa, ubicándose en el puesto 21, gracias al impacto del nearshoring, según reveló Omar Troncoso, director general de Kearney México.
De acuerdo con el Índice de Confianza de Inversión Extranjera Directa 2024 de Kearney, a nivel global, los inversionistas están considerando a nuestro mercado como destino para sus recursos.
En el año 2023 se anunciaron inversiones en México por un total de 106 mil millones de dólares, de los cuales 36 mil millones ya se han concretado.
Según Troncoso, la atractividad de inversión en México ha aumentado en diversas industrias y regiones, lo que lo posiciona como un destino clave para el nearshoring.
El directivo mencionó que la IED se ha mantenido estable en nuestro país en los últimos años y que México ocupa el sexto lugar entre los mercados emergentes, mejorando su posición respecto al año anterior.
En relación al impacto de un posible triunfo de Donald Trump en las elecciones de Estados Unidos, Troncoso explicó que el nearshoring tuvo su origen en la guerra comercial durante su administración, por lo que con un gobierno republicano este fenómeno podría acelerarse.
INSEGURIDAD
Troncoso señaló que a pesar de la posición favorable de México para atraer inversiones, la inseguridad podría afectar este panorama, especialmente en los estados del sur del país.
La inseguridad en las carreteras incrementa los costos de exportación hacia Estados Unidos y representa un riesgo adicional para las empresas.
EN EL MUNDO
Los países líderes en el ranking de IED son Estados Unidos, Canadá, China, Reino Unido y Alemania. Según Troncoso, el 88% de las empresas planea aumentar su IED en los próximos tres años, mostrando un aumento respecto al año anterior.
Los inversionistas consideran que existen riesgos que podrían impactar sus decisiones de inversión, como un entorno empresarial más restrictivo en mercados desarrollados o tensiones geopolíticas.
Entre los factores que influirán en las decisiones de inversión se encuentran las capacidades de innovación, la eficiencia de procesos legales y la facilidad de movilizar capital.