Un conflicto entre artesanos y trabajadores en el sitio arqueológico de Monte Albán, Oaxaca, ha llevado a las autoridades locales a cerrar temporalmente el sitio a los visitantes.
La medida se produjo luego de que uno de los tres grupos de comerciantes que venden sus artesanías en Monte Albán ocupara el pasado 30 de septiembre varios espacios del sitio exigiendo un aumento en el número de sus vendedores, informó el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). reportado.

«En sábado [Sept. 29] los artesanos se instalaron en el sitio sin seguir las reglas”, dijo el jefe del área jurídica de Monte Albán a El Imparcial, diario local de Oaxaca. «Estamos protegiendo este sitio debido a violaciones de las reglas internas».
Los miembros del grupo, una cooperativa llamada Unión de Productores y Artesanos Danny Di Paa, dijo a Canal 13 Oaxaca que ya ocupan los cargos que reclaman desde hace 60 años mediante acuerdos verbales con autoridades del INAH. Dicen que sus lugares fueron ocupados por falta de permisos escritos y que desean obtener la autorización adecuada para el trabajo que han realizado durante décadas.
En su comunicado, el INAH dijo que el subdirector de Monte Albán, David Andrade Olvera, se reunió con los artesanos para explicarles que el sitio no tiene las condiciones para incluir más vendedores. El sitio permanece cerrado desde el 1 de octubre por orden del INAH de Oaxaca y funcionarios del sitio.
Según El Imparcial, trabajadores de Monte Albán encabezados por el jefe de seguridad del sitio, Raúl Zárate, bloquearon el ingreso a artesanos y visitantes la mañana del 1 de octubre, portando carteles que exigían el diálogo entre artesanos y autoridades.

“Exigimos la regularización del comercio informal, el diálogo, no venta en pasillos y estacionamientos”, decía el cartel de un trabajador.
Mientras tanto, los artesanos de Danny Di Paa al pie de la carretera exigieron un trato respetuoso y digno.
“Estamos exigiendo una solución a nuestras demandas”, dijo a El Imparcial la portavoz Araceli Amaya. “No pudimos continuar con el diálogo porque [Monte Albán’s authorities] nos ofrecen volver a los mismos espacios. Estamos siendo explotados”, afirmó.
Amaya explicó que están obligados por las autoridades del sitio a barrer los pisos del sitio todos los días y no quehaceres que se supone que son voluntarios.

El INAH dijo que cuenta con todo el apoyo de otros dos grupos de comerciantes y algunos artesanos independientes que también trabajan en el sitio. “Todos entienden que no es viable incrementar la carga de Monte Albán en términos de espacios de venta”, afirmó el INAH.
Por su parte, miembros de Danny Di Paa acusaron al INAH de intentar poner en su contra a las organizaciones de sus compañeros artesanos y culpar al grupo del cierre de Monte Albán.
con informes de El Imparcial