Wall Street cerró este viernes la mejor semana del año, con una subida superior al 5 % en el Nasdaq, gracias a los últimos datos de inflación, empleo y consumo en Estados Unidos, que han alejado el fantasma de la recesión.
Tras una sesión de viernes positiva, con ganancias generalizadas en torno al 0,20 %, el Nasdaq acumula una subida semanal del 5,2 %, hasta los 17.631 puntos; el S&P 500 del 3,9 %, hasta 5.554 unidades, y el Dow Jones del 2,9 %, hasta 40.659 enteros.
«El calendario económico de la semana estuvo lleno de datos sólidos que ayudaron a aplacar los temores de recesión», dijeron los analistas de Wells Fargo, recordando la volatilidad provocada hace unos días por la subida del paro en EE.UU..
La inflación en Estados Unidos se situó en julio en su nivel más bajo en casi tres años: el 2,9 % en tasa anualizada, una décima menos que en junio, lo que allana el camino para que la Reserva Federal baje los tipos de interés en septiembre.
Además, se publicaron en EE.UU. unos datos de ventas minoristas mejores de lo que esperaban los economistas, el gigante de los supermercados Walmart aludió a un «consumidor estable» y bajaron ñas peticiones semanales de subsidio de desempleo.
En medio de esos buenos datos, el rendimiento del bono del Tesoro a 10 años descendió hoy al 3,883 %.
Los inversores estarán pendientes de nuevas pistas sobre política monetaria del jefe de la Fed, Jerome Powell, que participa la semana que viene en el simposio de banqueros centrales de Jackson Hole (Wyoming).
La analista Tiffany Wilding, de Pimco, argumentó que el incremento en la tasa del paro de julio responde al «aumento de la oferta de mano de obra debido a la afluencia de la inmigración, en lugar de la pauta habitual de pérdida de empleo».
El sector tecnológico fue uno de los grandes beneficiados de la semana, con un avance del 8 %, y en especial el subsector de los semiconductores (14 %), con ejemplos como el de la fabricante de chips Nvidia, que gana casi un 19 % acumulado.
En otros mercados, los futuros del petróleo del Texas para septiembre cierran en 76,65 dólares el barril tras una bajada cercana al 2 % este viernes, tras reportes de que Catar pidió a Irán no atacar a Israel mientras se negocia el alto al fuego en Gaza.
El precio del oro, activo refugio en tiempos de incertidumbre, marcó un récord de 2.500,99 dólares la onza, y los futuros en EE.UU. subían a 2.532 dólares, por la confianza de los inversores en próximas bajadas de los tipos de interés.